Tras más de treinta años de proceso, la Corte Interamericana de Derechos Humanos anunció su condena histórica al Estado Colombiano sobre el exterminio de más de seis mil representantes del partido Unión Patriótica, durante las décadas de los ochenta y noventa, respectivamente.
El anuncio fue bien recibido por los militantes de la colectividad. Una de sus representantes, la senadora Aida Avella, calificó de histórica la decisión y espera que el Estado atienda las solicitudes de la Corte, entre ellas, una comisión para constatar la identidad y parentesco de las víctimas.
“Este es el fallo que quedará en firme y todos los compañeros y compañeras deben sentirse también ahí, porque al fin se hizo justicia; nosotros también queremos que se entienda en el país, que los que participaron en este terrible genocidio estatal, que no pueden jugar con la vida de ningún colombiano, independientemente de su credo político”, expresó.
Por su parte, el senador Humberto de la Calle dijo que, aunque se hace justicia, lamenta que hayan pasado varios años para la respuesta del Estado Colombiano.
“el Estado colombiano debió haber reconocido este hecho hace años. Algunos esfuerzos y antecedentes se dieron en las negociaciones en La Habana. De hecho, existe un macro caso en la JEP en búsqueda de la reparación de las víctimas de este hecho”, comentó.
De otro lado, el presidente Gustavo Petro respaldó la decisión de la Corte Interamericana y recalcó su proposición de un pacto de paz para que se consolide un camino hacia la paz total.